DENTISTA, cuando escuchamos esta palabra, muchos de nosotros reaccionamos con miedo y otros con rechazo. Quizá nosotros, cuando éramos pequeños nunca fuimos a un dentista y cuando finalmente lo hicimos, resultó una experiencia tan dolorosa que decidimos ir lo menos posible.
Es precisamente esto lo que no debe suceder con nuestros hijos. Aquí le doy varias razones para llevar a su hijo al dentista cada 6 meses.
1) Comencemos porque ellos deben reconocer que su boca es una parte muy
importante de sí mismos que tienen que cuidar
2) También para establecer una buena relación entre sus hijos y el dentista
3) Después, porque es mejor visitar al dentista cuando se tiene la boca sana y
se puede evitar el trauma y por consiguiente el miedo
4) Por supuesto, para prevenir las caries
5) Y desde luego, para saber qué alimentos pueden causar caries
6) Y sí, adivino, Para curar las caries que pueda haber cuando son pequeñas y
evitar así un dolor innecesario
7) Para asegurarse que todos los dientes tengan espacio para salir
8) Para detectar malos hábitos que algunos niños tienen con la lengua, los
dedos, los labios u otros objetos
9) Y finalmente, porque si su boquita está enferma se convertirá en una
criatura triste e insegura a quien no le gustará o le dará vergüenza sonreír.
Acostumbrarlos a ir al dentista es quizá uno de los mejores hábitos que usted le pueda enseñar a sus hijos.
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